Gilded Glamour: El estilo del año decretado

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Entre corsets, perlas, tiaras y guantes, la Met Gala del 2022 ha decretado que su temática electa, es tan solo el comienzo del estilo predominante de lo que resta del año.

POR LIZ ALMEIDA 04 DE MAYO 2022.

El primer lunes de mayo volvió a la normalidad que conocíamos, y tras dos ediciones consecutivas marcadas por el regusto amargo de la pandemia – donde el 2020 significó la cancelación definitiva del evento y su siguiente año dejó que desear en la interpretación de la primera parte de la exhibición; In America: A Lexicon of Fashion – finalmente el 2022 se respiró como una bocanada de aire fresco y fiel a la naturaleza de la gala.

Una temática que, pese a ser la segunda parte del enfoque que honra al léxico y antología de la moda americana, tuvo un evidente grado menor de complejidad que la anterior. No por ello el glamour estuvo ausente y contrario a lo que se podría especular, la gala del Met y su Gilded Glamour fueron el vistazo a la moda del futuro: uno en el cual conservamos la modernidad característica rescatando la teatralidad y elegancia de la edad dorada.

Blake Lively, Met Gala 2022. | Getty Images.

Año tras año, el tema de la Met es propuesto con anticipación; lo que pueda pasar posterior a ello es mera interpretación, esfuerzo y análisis crítico del código proporcionado. Esta ocasión, el Gilded Glamour fue la oportunidad perfecta para explotar todas las tendencias que tarde o temprano y por razones obvias, reinarían el año en curso. La gala de este lunes 2 de mayo fue tan solo el pretexto que no sabíamos que necesitábamos para anhelar corsés, guantes dramáticos e incluso el considerar portar tiaras como accesorios cotidianos.

Puede ser la magia del evento más grande de la moda que reúne a celebridades bajo el mismo concepto lo que eriza la piel cuando se piensa en la Met Gala, pero en lo particular, a partir de su selección de tema y el trasfondo histórico del mismo, logramos advertir las notas de sensibilidad que lo definen; el encanto de la moda recae en sus intenciones y motivaciones, en la Met gala esto es la premisa esencial, y por supuesto que ningún elemento está presente por casualidad.

De izquierda a derecha: Blake Lively, Gigi Hadid, Laura Harrier, Nicola Coughlan, Shawn Mendes, Kim Kardashian, Lizzo, Billie Eilish, Daisy Edgar-Jones, Kaia Gerber, Alicia Keys, Cradi B. | Fotografías: Getty Images.

La edad dorada en Estados Unidos fue un periodo comprendido entre 1870 y 1891 definido por la expansión económica, una acelerada industrialización y un inminente crecimiento demográfico. Por otro lado, esta pagina en la historia americana estuvo caracterizada simultáneamente por desigualdas económicas y sociales, pues el cambio implicó la aparición de inmigrantes de todo el mundo habitando en el país donde las promesas se pintaban en colores brillantes. Que la edad dorada sea celebrada en una época donde las oportunidades sociales sean día con día más incluyentes es un hecho afortunado.

Moda femenina en 1870 a 1880. Era Buliciosa. | Ilustración: Bellatory,

Y es que la Met Gala es eso; una fusión precisa con las dosis adecuadas de arte, arquitectura y teatro. Una prueba que logra el cometido de demostrar que la moda no se reserva a lo estético, que el estilo y la indumentaria que portan en la alfombra no es más que un efecto adverso a la cultura, expresando historia que podremos haber dejado atrás en materia de tiempo, pero siempre podemos traer de vuelta en elementos visuales.

El glamour de la edad dorada con un twist actualizado ha regresado para permanecer, cuando menos, lo que resta del 2022. El aumento de un 300%, tan solo en Google Trends, en la búsqueda de corsets para mujer en las ultimas 72 horas son más que prueba suficiente de ello. Y no podemos ansiar menos el comienzo de esta era en la que nuestras manos estén cubiertas por guantes elegantes, donde el discurso de nuestro estilo se enfoque en el ayer sin olvidar lo que somos hoy, cual Blake Lively venerando la estatua de la libertad y la evolución económica como sinónimo de perfección y abrazos al cambio.