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10 años después, la moda y aspiraciones del 2014 regresa.

  • Foto del escritor: Liz  Almeida
    Liz Almeida
  • 24 ene 2024
  • 4 Min. de lectura

POR LIZ ALMEIDA 24 DE ENERO, 2024.



Una canción puede regresarte (con lujo de detalle) a un momento especifico. Una playlist con éxitos musicales de un no tan lejano pero aun sorpresivamente distante 2014 me lo confirma al tiempo que escribo esto. Y como recordar es volver a vivir, ¿Qué mejor que hacerlo a través de los sentidos? Y justo como por arte de magia (que si me lo preguntan eso es el equivalente a la música) revivo aquellos días en los que Tumblr era el hogar de inspiración y aspiración, Victoria’s secret vivía su mejor momento y la vida parecía tener un filtro color rosado todo el tiempo. Las botas Ugg eran símbolo de estilo y las multitudes morían por un bálsamo Eos, asistir a Coachella o tener un perfil de Instagram medianamente cercano a Kylie Jenner.


Pero si el 2014 fue hace 10 años ¿Qué más da hablar de ello ahora? La respuesta es que, para bien de muchos o quizá mal de otros, el 2024 promete traer de vuelta la moda y tendencias de la década pasada ¿una locura? Para nada. ¿una oportunidad? Totalmente. Pero solo si me permiten justificar por qué esta repentina aceptación (parcialmente) colectiva a su regreso.


Hemos hablado de la naturaleza cíclica que la moda posee, el como cada cierto tiempo los ‘comebacks’ o regresos son indispensables para evolucionar la dinámica social y comercial. Del cómo no es sorprendente encontrar escaparates con mercancía que compraste hace años y que (muy probablemente) desechaste por ser ‘pasada’, cuando de hecho solamente desconocías que eventualmente su regreso sería inminente y fuerte. Cíclica. A eso se refiere, y como consejo importante, recordar este calificativo puede salvarte de decisiones impulsivas y apresuradas (aun cuando sean 10 años después).


La cuestión es que no aprendes lecciones hasta vivirlas, pero el 2024 es una ya mencionada oportunidad para -finalmente- lograrlo. Con alertas de tendencias que van desde el color durazno del año, de acuerdo a Pantone. Remontándonos a ese momento de la historia donde los míticos skinny jeans en este tono reinaban los armarios de un porcentaje importante de la población. Hasta el regreso progresivo de la estética grunge, extraída de tendencias como el estilo gótico que viene pisando fuerte desde el 2022 impulsado por el Y2K.



La disputa comienza aquí: he encontrado que la mitad de las personas rechaza por completo la idea de que el 2014 regrese, mientras que la otra ruega por ella, ambas son válidas y en mi opinión puedo (por descabellado que parezca) identificarme con ambas partes.


Me explico: en 2014 la moda comercial para adolescentes de ese entonces -que es el momento que yo atravesaba en su momento-  no era exactamente para gusto de todos. Basta con googlearlo para comprobarlo y evidenciar el como curiosamente ese fue el año en el cual decidimos que nos gustaban los pantalones de galaxia, los búhos eran ornamentales y que los mostachos eran una declaración de estilo (si, en serio) por lo que, abrazar su regreso es complejo, porque los recuerdos que despiertan inevitablemente, reviven dichas tendencias. La buena noticia de la contraparte, donde la mitad de las personas que si están dispuestas y abiertas a tal comeback de hace diez años, han declarado anticipadamente que lo harán bajo sus condiciones selectivas y dado a su inevitabilidad, tu también deberías hacerlo.


La cuestión es la siguiente (tomar nota para entender el arte de los ciclos de moda):


La aceptación que he identificado por el revival del 2014 quiere solo las partes destacadas de él. Deseables, icónicas, discretas y nostálgicas. Porque los comebacks exitosos residen en ello: nostalgia. Y pruebas como el Y2K, o productos comerciales virales de los últimos años lo comprueban. Pero mas importante y aunado a ello, la mayoría desea experimentar de nueva cuenta el 2014, 10 años después, porque en su momento no lo vivieron en la edad apropiada para su total disfrute.


¿Dónde estabas hace 10 años? ¿Y que posibilidad tenías de vivir la locura y encantos del 2014 como un adulto, o adolescente si quiera? ¿Experimentar la plenitud de bailar y vivir la mejor época de la música pop de la década anterior en clubs nocturnos? Claro está que hoy día e indiferente a tu edad puedes hacerlo. Pero la promesa y la ya mencionada nostalgia despierta en nosotros el anhelo de vivirlo esta vez, porque es lo más cercano a un viaje temporal, uno del cual regresaremos a las nuevas propuestas que prometen el nuevo año: saltando del tumblr de vuelta al actual.


Así que las modas y sus regresos no implican una replica del pasado, sino una transformación y adaptación a la actualidad.

El 2024 promete traer de vuelta el 2014 porque es cronológicamente pertinente y la nostalgia demanda. Pero puedes despreocuparte de los pantalones galácticos y accesorios tan pesados como cuestionables, que pese a que el color del año evoca memorias de estilo igualmente controvertidas, debes recordar que en dado caso será adaptado a las tendencias actuales y la libertad de usarlas o no, exentándote de recuerdos bochornosos o bien, permitiéndote enorgullecerte de formar parte de modas que, descuida, eventualmente muchos anhelarán al grado del homenaje.


Porque si, la naturaleza progresiva de los humanos es pensar que hoy algo es bueno, innovador y atractivo. Para verlo años adelante y cuestionar nuestro gusto y estilo (Si. Justo como los mostachos) pero ¿Qué no es eso la moda y la magia de experimentarla justo como la vida misma? Arriesgar, apreciar y evolucionar.


Porque el estilo personal solo se consigue a través de tropiezos, errores y aprendizajes aplicados. Por ello (y como mi deseo atrasado de año nuevo para ti y para mi) disfruta la visita eventual del 2014, acepta donde estabas en su momento sin perder de vista donde estás en el presente, baila despreocupadamente los éxitos que le acompañaban y quizá, solo quizá, ábrete a la oportunidad de usar una tendencia que grite 2014, asegurándote que no grite demasiado fuerte.


Justo como los mostachos.

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